Semifinales ultravioletas: Clausura 2024.


 

Por Omar Colío

América 1-0 Guadalajara (Global)

Al chivahermano le duele esta derrota como una patada en los huevos. Porque al inicio del torneo, este equipo se veía como otro experimento fallido en la putrefacta era Vergara. Pero, de repente, se habían enrrachado justo en el momento preciso, como un cometa inesperado en el cielo sombrío del futbol mexicano.

Parecía que una vez estábamos viendo la historia ese equipo mediocre, de ese equipo de mierda que se enrracha y termina ganando todo, película que hemos visto ya miles de veces en el surrealista futbol mexicano. El chivahermano se ilusionó, parecía que el Guadalajara era ese caballo negro que viene de atrás y se roba el trofeo. Y lo iba a hacer desde el cabalístico sexto puesto, el maldito sexto puesto. Pero al final. A pesar de que por momentos parecía que tenían al archienemigo entre en las cuerdas y tambaleándose, no lograron hacerle daño y así no se puede ganar. Por otro lado, tampoco vinos una actuación brillante del América. Tuvieron que recurrir a sus viejas y conocidas artimañas para siquiera hacer un gol. Este equipo cuyos adeptos rezan que es tan grande, tan superior al resto, pues la verdad es que no lo ha demostrado. Apenas y pudieron ganarle a estas pinches Chivas. Y eso que en verdad eran superiores, al menos tuvieron superioridad numérica todos los minutos en los que Cade Cowell  y Javier Hernández estuvieron en la cancha. Un aplauso a la directiva por este tremendo par de refuerzos. Dos tipos que están en la Luna. Dentro y fuera de la cancha. Literal y metafóricamente. Jugamos con nueve en el terreno de juego y un par tratando de estorbar mientras están montados en una nube de su propia flatulencia que los ha llevado a perderse en lo etéreo de las estrellas. Un genio, Gago.

PD. Una lástima que Alvarado nunca haya aprendido a jugar ni con Vega ni con Guzmán.

Cruz Azul 2-2 Monterrey (Global; Cruz Azul avanza por mejor posición en la tabla.)

Una vez más el Cruz Azul llega a la final y se encuentra a su némesis. ¿Será esta la ocasión en la que por fin podrá encontrar catarsis? No lo sé, pero no me da muy buena espina que en las semifinales estuvieron a punto una vez más cruzazulearla. Este equipo es una oda a la eterna mediocridad de los equipos de la liga mexicana. A veces tiene momentos solemnes, pero de la nada se cae y se hace pedazos contra el piso. Y aun así, Cruz Azul, el pueblo está contigo, con nuestro héroe de siempre, el héroe mexicano, el héroe patético, siempre en el piso, como nos gusta ver a nuestros héroes y a nuestros santos, sufriendo, crucificados. Cruz Azul será tu nombre.

Y así llegamos a la final 'de ensueño', una farsa morbosa entre dos equipos polares pero populares que mantendrán a las masas hipnotizadas, una final que generará muchas expectativas, pero que lo más seguro es que vaya a estar de hueva. 

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