Por Omar Colío
Cuando se habla de ultras en Europa, normalmente se habla de
hooligans o de grupos de aficionados intolerantes que siguen las tendencias de
la ultraderecha. Pero ese no es el caso de la Green Brigade, barra del Celtic
FC formada en 2006, que desde la curva norte de Celtic Park se preocupa por las
causas de los más desfavorecidos.
Desde su fundación, la Green Brigade se ha ocupado de apoyar
a las víctimas del orden establecido por el capitalismo, desde los palestinos,
pasando por el movimiento Black Lives Matter y principalmente al Irish
Republican Army, un grupo guerrillero que lucha por el fin de la ocupación de
Irlanda del Norte por parte de la Gran Bretaña.
Una de sus protestas más significativas se dio en 2010
cuando protestaron en contra de que la amapola del recuerdo (símbolo del
personal militar británico muerto en guerra) apareciera en la camiseta del
Celtic, mostrando mantas que decían: “Sus obras avergonzarían a todos los
demonios del infierno. Irlanda, Irak, Afganistán. No a la amapola manchada de
sangre en nuestros aros.”
Por supuesto que sus nexos con los grupos radicales les han
costado estar en el ojo del huracán y varios intentos de desaparición por parte
de la UEFA y del propio Celtic, sin embargo la Green Brigade se mantiene en
resistencia haciendo protestas en contra de la criminalización de sus
manifestaciones. Pero la Green Brigade se mantiene en pie de lucha y seguirá
luchando por las causas de los desfavorecidos, la temporada pasada se
manifestaron en favor de los trabajadores de ferrocarril británicos en huelga y
apenas este fin de semana mostraron una manta en apoyo de la resistencia palestina
que combate al imperialismo en Medio Oriente.
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