“Lo que nos fascina del fútbol es el azar en los botes de
una bola, ¡Vaya metáfora de la vida!, la bola representa al planeta entero, la
bola también simboliza cada una de nuestras cabezas siendo pateada por los
designios de la existencia. Asimismo, la bola es el útero donde se gesta el gol.
Y el gol es ¡Bam! el rompimiento de gloria, la explosión del huevo cósmico, el
orgasmo máximo. Desde tiempos inmemoriales dejó de ser original la noción que
vincula a la portería con la vagina...”, escribió el psicoanalista junguiano.
El psicoanalista freudiano bajó su teléfono e inhaló un par
de líneas.
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