El día que la NFL demuestra que la familia apesta

Por Omar Colio

Cada último jueves de noviembre todo el mundo me pregunta lo mismo. ¿Por qué los Dallas Cowboys siempre juegan en el día de acción de gracias? La respuesta es: porque en 1966, el entonces dueño de los Cowboys se dio cuenta del gran éxito económico que habían sido los juegos de los Detroit Lions en ese día feriado, en el que los felinos juegan desde 1934.

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La verdad es que no hay una razón profunda detrás de esa tradición tan añeja, es una tradición basada en los negocios, una tradición exclusivamente capitalista. Después de todo, qué se puede esperar de una tradición que es parte del día en que las familias gringas (y una que otra familia whitexican) se reúnen para celebrar el genocidio de millones de nativos americanos.

La verdadera cuestión para analizar es, en todo caso, ¿Por qué los juegos de la NFL en día de acción de gracias son un éxito? Año tras año, los partidos jugados en esta fecha son los de mayor audiencia televisiva en la Unión Americana. ¿Por qué? Obviamente el hecho de que se jueguen en un día de asueto ayuda, pero hay millones de cosas que hacer en un día de asueto, ¿Por qué tantos millones de personas eligen ver un partido de futbol americano?

Después de años y años de estudiar a la cultura gringa (que está llena de locos geniales y de irremediables idiotas), mi hipótesis es que en Estados Unidos (como en todo el mundo) la familia es un lastre doloroso, por eso millones de personas hacen todo lo posible por escapar de ella. Yo no sé cómo sea su relación con su familia, la mía, y la de la mayoría de las personas que conozco, es turbulenta, y eso que si bien no creo que sea preciso describir a mi familia como cálida, afectiva o amorosa, al menos puedo decir que me apoya en ciertas cuestiones, no quiero ni imaginarme cómo es vivir en esas familias que son completamente tóxicas en las que tantas y tantas personas están atrapadas.

Pero en fin, se supone que esto es un escrito sobre la NFL, no un diván para hablar sobre mis traumas, así que continuemos con lo primero. La celebración de día de acción de gracias en Estados Unidos se parece mucho a la celebración de Navidad en México, hay una gran comida en la que se reúne TODA la familia. En mi pepenar entre la cultura gringa descubrí que en los discursos sobre este festejo se repiten una y otra vez las quejas por tener que pasar tiempo con la familia, constantemente se citan peleas y provocaciones pasivo-agresivas. Y por supuesto que en las familias gringas tampoco faltan el clásico tío machista o la clásica abuela fanática religiosa y otros tipos de parientes indeseables.

Pero afortunadamente para ellos, en día de acción de gracias siempre hay NFL, siempre hay una distracción que les permite ignorar que están emparentados con personas tan horribles, a las cuales muchas veces sólo tienen que aguantar una vez al año, de acuerdo con las costumbres gringas en las que un hijo normalmente deja la casa familiar para siempre una vez que alcanza la adultez.

La tradición de jugar futbol americano en día de acción de gracias viene desde el Siglo XIX, cuando se empezaron a jugar partidos colegiales en esa fecha, particularmente en el área de Nueva Inglaterra, la NFL juega en ese día desde su incepción en 1920, sin embargo se considera que el parteaguas fue en 1934 cuando los recién formados Detroit Lions decidieron tener un juego en casa en esa fecha con la intención de llamar la atención de la ciudad a la que recién se habían mudado en un día de asueto. Según las crónicas de la época el resultado fue maravilloso para los Lions, localidades agotadas y miles de personas que se quedaron afuera del estadio sin boleto, las cuales desgraciadamente tuvieron que regresar a casa con sus horribles familias.

Bueno, esa es mi teoría semiantropológica del por qué la NFL en día de acción de gracias es algo tan grande, a lo mejor si la familia fuera algo más que esa cosa horrible, ese pozo de dolor y chantaje, ese lastre, eso que citando a Engels no es otra cosa más que un espacio para el establecimiento de las relaciones de poder, la gente pasaría tiempo con ellas y no tendría que fugarse a través de un partido de futbol americano.

La NFL anunció recientemente que a partir del próximo año también se jugará un partido en el famoso Black Friday (el día posterior al jueves de gracias), será el cuarto que se celebre alrededor de esta festividad, se sumará al juego temprano de los Lions, que juegan en esta fecha desde 1934 (salvo de 1941 a 1944 por la Segunda Guerra Mundial), al de la tarde establecido en 1960 y dado a los Cowboys en 1966 (salvo en 1975 y 1977 cuando fueron reemplazados por los St. Louis Cardinals) y al de la noche, que se juega desde 2006 con dos equipos no específicos que son elegidos por la liga año por año.

Viva el futbol americano. Muerte a la familia.

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